sábado, 16 de febrero de 2013

Yo soy empleo: ayudas reales para las empresas frente al marketing del buen rollo de la crisis

http://prensa.bbva.com/actualidad/notas-de-prensa/espana/yo-soy-empleo-promovera-10-000-nuevos-puestos-de-trabajo__9882-22-101-c-100929__.html

Yo soy empleo: ayudas reales para las empresas frente al marketing del buen rollo de la crisis


Hoy arranca Yo soy empleo, una campaña de BBVA destinada a la ayuda directa a las empresas que contraten a desempleados con una ayuda directa que puede llegar a 3.000 euros si se formaliza un contrato indefinido y 1.500 euros para los contratos temporales. Este programa de ayudas directas, se complementa con una serie de cursos de formación presenciales que se realizarán por toda la geografía española.
Mediante esta campaña, BBVA va a destinar unos 25 millones de euros para la contratación de desempleados, persiguiendo un objetivo de 10.000 empleos entre las pymes y los autónomos que tengan menos de 250 trabajadores. Esta campaña, contrasta fuertemente con el marketing anticrisis de Campofrio para estas navidades o incluso con el famoso Esto lo arreglamos entre todos de hace ya un par de años.

La acción de BBVA es una acción muy buena en la que caben pocas críticas la verdad. En algunos medios, se le recrimina que dentro de los requisitos del programa se “obligue” a la empresa a tener cuenta abierta en BBVA y a que el trabajador contratado domicilie el cobro de su nómina en la entidad. A ver cabezas pensantes, ¿cómo controla BBVA que la empresa existe realmente si esta empresa no es cliente? ¿Cómo controla que no ha existido un fraude de ley en la contratación para el pago de la nómina del trabajador contratado?
Por el resto de requisitos que se piden, son realmente asumibles y realmente sólo se pide empresa al corriente de pagos y la contratación de un desempleado que lleve más de dos meses en el desempleo. El espíritu de la campaña es que más empresas se sumen a la campaña, que el volumen de ayudas a la contratación sea muy superior y que el complemento entre las ayudas públicas que se esperan y las privadas, permitan dar un ligero empujón a la situación económica y al drama del desempleo. Esperemos que sean muchas más las sumas en el proyecto y que al menos, algunas empresas se favorezcan de estas políticas de solidaridad empresarial.